El Corsario
Este 2021 será año de proceso rectoral en la Universidad Veracruzana (UV). Hasta el momento, lo único que tenemos por entre nuestras manos son indicios de quienes serían los posibles postulantes y posteriormente candidatos a la batalla naval por ocupar la silla más sagrada de la máxima casa de estudios del estado, silla que en esta ocasión tendrá mayores condiciones y viabilidad para ser desocupada, siguiendo la normatividad en turno y la ética (creemos que hay una ) de la Junta de Gobierno . Algunos nombres ya salen a colación, ya se vaticina qué investigadores -tal vez- se animarían a ese extenuante y tan divertido vericueto institucional y político; en términos, por supuesto, de política interna de nuestra universidad en la que siempre, sin lugar a dudas #DamosMás .
Si nos retrotraemos un poco , veremos que en el proceso pasado el argumento que más resaltó fue el de la continuidad. ¿Saben? Me parecían interesantes dos criterios que la legislación establecía para la designación: investigación y gestión universitaria. Las cosas así puestas sobre la mesa eran más que claras por obvias razones. Desde un punto de vista lógico, podríamos inferir el nombre de quien estaría a cargo de Rectoría. El resultado nos hizo pensar que la política -y no la lógica- pesa más que unas normatividades internas . ¡Perdonen por la ingenuidad de esta afirmaciones! En el mundo corsario el honor es algo que aún vale. Ese es cuento viejo , pasado . La continuidad vio nuevamente la luz .En efecto , y de acuerdo con la opinión de integrantes de la comunidad UV, muchas cosas continuaron igual para bien de unos pocos y para martirio de gran parte de la misma: académicos, estudiantes , trabajadores , investigadores . Como en todo , el trabajo de algunos funcionarios ha sido congruente con su discurso. En lo personal , no puedo decir lo contrario de ciertos casos. Existen conciencias muy valiosas aún. Pero lamentablemente no son la mayoría. En fin, la continuidad aún nos debe muchas propuestas que el viento y estos aires pandémicos se han llevado al sendero de las ilusiones olvidadas, de las experiencias no vividas. ¡Esperemos que sí sean una realidad!
¿En qué se debe trabajar desde Rectoría, independientemente de quién sea el nombre elegido? Entre otras tantas cosas valiosas , creemos en esta columna (o calumnia si así lo prefiere el lector ) que la democratización del conocimiento es pilar fundamental. Sí, tiene que ver con la apertura a la recepción de propuestas de los diferentes sectores de la comunidad universitaria . El discurso de la UV durante mucho tiempo ha sido la construcción de pensamiento crítico y la socialización de los saberes para una mejoría entre la ciudadanía. Pero , como sabremos , es teoría y en teoría las cosas son muy bonitas. Ha habido avances significativos en la materia . Se han emprendido acciones por parte de diferentes instancias académicas en esa dirección. Sin embargo, hay mucho trabajo por hacer todavía. Principalmente mejorar muchas actitudes burocráticas que son un escollo para el progreso de la gestión del marco epistémico (conocimiento, no quería repetir la palabra).
Vistas así las cosas desde este catalejo , el horizonte no es tan nítido todavía en materia de democratización. Existen muchas iniciativas fuera de la universidad y otras que son archivo , que bien podrían ayudar a robustecer las estrategias que se han consolidado para lograr los fines marcados casi desde el inicio de la vida en la UV. ¿Qué hacer? Empezar a escuchar otras voces , salir de los dominios y de la lógica de “unos cuantos “. La comunidad ya no quiere que todo sea un bello discurso acerca del impacto social , quiere que sea un hecho tangible , palmario; que las instancias designadas para ese puente entre el conocimiento académico y la sociedad abran las posibilidades . Sí, Radio UV es el caso más concreto y desde donde se podría hacer mucho, pero cada vez , el círculo para no mover personas y su zona de confort es más cerrado. No es el único caso , ustedes podrán enlistar otros.
¿Qué propuesta rectoral tendremos? ¿Podremos ver las iniciativas y la inclusión de la democratización del conocimiento entre ellas? Iniciando el año habrá alguien que se destape para participar en esa batalla? Esto último es altamente probable, más no diremos , todavía . Como en todo , el tiempo nos dará las bases para ver esa luz o esa oscuridad , según sea el caso . Mientras tanto , si la pluma con tinta corsaria se niega a escribir un poco más antes de decir adiós a este año y toda su vorágine , deseo una feliz celebración filibustera. Y recuerden : ¡No pierdan de vista el horizonte!